miércoles, 19 de enero de 2011

Huarochirí en la independencia del Perú


Ruperto Cáceda Vidal 

LA LUCHA POR LA INDEPENDENCIA NACIONAL DEL PERU

Esta no se limita a los años 1820 – 1824, sino que históricamente fue un proceso que empezó desde el primer momento de la llegada de los españoles, a lo largo de los trescientos años que duró su presencia en el Perú.
Los peruanos fueron los primeros en organizar los movimientos libertarios para expulsarlos de nuestro territorio, entendiéndose después a toda la colonia española, con el grito de libertad de Tupac Amaru II
El inicio de la lucha por nuestra independencia data del 1536, cuando Manco Inca organizó la resistencia de Vilcabamba, movimiento que se prolongó por más de 30 años y culminó tres siglos después el 09 de Diciembre del 1824, con la expulsión de los invasores y la restauración de la soberanía nacional
A lo largo de la presencia española en el Perú, sucedieron más de 300 sublevaciones por el grado de explotación y dominio colonialista, donde el pueblo peruano combatió con heroísmo y tenacidad en defensa de su libertad y soberanía, pese a las bárbaras represiones, la anarquía interna y la inferioridad de las armas.

LA FORMACION DE CUATRO EJERCITOS EN LA LUCHA POR LA INDEPENDENCIA NACIONAL DEL PERU

-   El de Juan Santos Atahuallpa (1536-1562) que proclamo la independencia del Perú en la Montaña
-   El de Thupa Amaru (1572) en la defensa del reducto de Vilcabamba
-   El de Tupac Amaru II (1780-783) que libertó a los pueblos del altiplano
-   El de Pumacahua y los Hermanos Angulo (1814-1815), cuyo ejército modelo europeo fue el primero del Perú en el siglo XIX, ejercito que juró la independencia del Perú con simbolos patrios de tradición incaica, bajo la protección cristiana de la Virgen de las Mercedes

LA LUCHA  DE TUPAC AMARU II Y SU EXTENSION CONTINENTAL

El Cacique Peruano José Gabriel Condorcanqui Noguera, Tupac Amaru II, se anticipó 30 años a todos los movimientos libertarios
Su alzamiento hizo temblar al Virreinato del Perú y se extendió en forma ejemplar al Virreinato de Nueva Granada con la rebelión de los comuneros de Socorro. Al Virreinato de las provincias del rio de la Plata con las sublevaciones de Tupiza, Jujuy, Catamarca y Tucumán. A la Audiencia de CHARCAS con la insurrección de La Paz. A los movimientos de la Audiencia de Quito y de la Capitanía General de Chile, entre otros lugares del continente
El grito de libertad de Tupac Amaru pese a la represión terrorífica continuo con la jefatura de Diego Cristóbal a quien acompañaron Mariano, Miguel y Andrés Tupac Amaru, junto con Tupac Catari y su esposa Bertolina Sisa y otros caudillos menores, siguiéndole centenas de sublevaciones, hasta la guerra por la independencia nacional

LAS GUERRILLAS DE HUAROCHIRI CON SAN MARTIN Y BOLIVAR

En la primera etapa de la lucha por nuestra independencia, las partidas de “montoneras” o “guerrillas” se formaban por iniciativa de los pobladores de la región de la sierra y de los valles de la costa para defenderse de la crueldad de los colonialistas y para cooperar con las fuerzas del ejército patriota libertador.
El general San Martín, de acuerdo con sus planteamientos militares, dispuso y alentó la organización de las partidas de guerrillas,  destacando al coronel Álvarez de Arenales hasta la sierra central, con el fin de organizarlas.
Mientras esto sucedía, había un gran sector de españoles en Lima, por ello, San Martín ordenó desde Huaura, fomentar la creación y organización de guerrillas en la sierra de Lima, con el fin de sitiar la capital y privarla de los recursos necesarios.
Esta labor fue cumplida por las guerrillas formadas en Huarochiri, Canta y Yauyos, que estaban bajo el mando de Ignacio Ninavilca y Huavique; en esta forma se estrechó el bloqueo, haciendo difícil la entrada y salida de la ciudad.
En estos momentos, San Martín consideró conveniente encomendar la dirección de las partidas al sargento mayor Isidoro Villar, designándolo Comandante General de Guerrillas, quien estableció su cuartel General en San Mateo de Huanchor.
Mientras esto sucedía, Ninavilca y su columna denominada “Valientes de Huarochiri”, atacó en Cieneguilla la guarnición de ese lugar, capturando tres prisioneros. Ese mismo año de 1820, realizó acciones en San Damián, Santa Inés, Quilcamachay, Chacllla, Palle y Santa Eulalia.
En 1821, pasó al pueblo de Espíritu Santo y habiéndose puesto de acuerdo con el sacerdote Casimiro Márquez, efectuó el 8 de Enero del citado año, la Jura de la Independencia.
Luego, Ninavilca se enteró que un funcionario, se dirigía a Lima por la quebrada de Cocachacra, conduciendo el ganado de esos pueblos y la plata que había reunido de los templos; este funcionario, contaba con el resguardo de dos compañías realistas. Para impedir el paso, Ninavilca se ubicó por las alturas de Otao, punto desde el cual descendió y  sorprendió al enemigo, quienes emprendieron la retirada, dejando la plata, fusiles y algunos hombres. Los fusiles que eran  cerca de cien, pasaron a las fuerzas de Ninavilca.
Ignacio Ninavilca fue uno de los peruanos en dar ejemplo con el riesgo, heroísmo y coraje. Jamás tuvo temor en dar cara a las fuerzas opresoras; cierta vez, respondió al general realista Monet lo siguiente: “Hago saber a todos los habitantes de Lima y de sus contornos que usando el derecho de represalia contra un tal Monet, quien ha publicado un bando ofreciendo un premio de cien pesos, por cada cabecilla y 25 por subalternos; y considerando que los bandidos españoles que viven degollando y matando para conseguir de ese modo les presten auxilios. Ofrezco: por premio de la cabeza de Monet, una gallinita culeca; por la de Ramírez, un capón; por la de Rodil, un perro; por la de García Camba, un pollo mojado; por la de Canterac, un pavo; y por cada soldado español, un huevo de gallina. Firmado: el Cacique Ninavilca”.
En Abril de 1821, el número de partidas aumentó considerablemente, estrechando más el cerco de Lima y llegando en sus correrías hasta las murallas de la ciudad. La permanencia de los realistas en la capital se hacía  más insostenible, y se hizo persistente la noticia de que los españoles abandonarían Lima por los caminos de Huarochiri o San Mateo de Huanchor, con dirección a Jauja.
Debido a esto, el comandante Villar que se encontraba en San Mateo de Huanchor, fue instruido para hacer frente al ejército español cuando se retirara de la capital. Debía sin descanso obstaculizarlo y perseguirlo por los flancos y la retaguardia impidiendo su desplazamiento por los caminos y tratando en todo momento de causarle los mayores estragos.
El 26 de Junio iniciaron los realistas su retirada; el virrey La Serna convencido de su impotencia para vérsela con las guerrillas huarochiranas, optó por la vía de Yauyos, donde los guerrilleros de la zona le infligieron un gran castigo.

Al dejar La Serna la capital, el general García Camba  que se encontraba en Jauja decidió bajar a Lima, disponiendo que sus mejores tropas, al mando de Canterac con un efectivo de 2500 infantes, 900 jinetes y  piezas de artillería, marchasen a la capital. Inútil fue la tentativa de Canterac de forzar el paso de la quebrada de Huarochiri en Casapalca, Chicla y Yuracmayo, la división realista fue detenida, ante esto el jefe español no tuvo más remedio que internarse por las punas. Esto sucedió en Agosto de 1821.
La importante labor desempeñada por las partidas huarochiranas, fue premiada por San Martín al otorgarles a los componentes, una cinta encarnada con hilos de oro en donde se leía : ¨A LOS CONSTANTES PATRIOTAS DE HUAROCHIRI. 24 DE NOVIEMBRE DE 1821¨.
Las fuerzas realistas establecieron su cuartel general en el valle de Jauja, convirtiendo esta localidad en el centro de sus operaciones. Desde allí, continuamente se enviaban expediciones a Huarochiri y Canta, con el fin de reconocer el camino para volver a la capital debido a las numerosas fuerzas que se encontraban en la quebrada de San Mateo de Huanchor, los realistas volvieron a la capital por la ruta de Yauyos.
Cuando los realistas ocuparon Lima, las partidas establecieron un severo control alrededor de la capital, manteniendo puestos de avanzada en Piedra Liza y en otros puntos cercanos a la ciudad. Una de las medidas que tomaron los jefes de partida para hacer frente a la ocupación de Lima, fue evitar por todos los medios, que ingresaran a la capital provisiones y alimentos, con este objeto, se situaron estratégicamente en las quebradas y en los valles cercanos de la ciudad. Para cumplir con esta finalidad, el Comandante y Gobernador de Huarochiri, José Ximénes y Victoria, movilizó sus partidas y ordenó a los habitantes de los pueblos de su jurisdicción, que impidiesen la llegada de víveres a la capital.
El general Canterac teniendo en cuenta que ya se dejaba sentir en la capital la escasez de alimentos y que con la ocupación de Lima no lograban ninguna ventaja militar, decidió abandonarla en la madrugada del 15 de Julio de 1823. Los españoles emprendieron su marcha hacia la sierra central por Olleros, siendo hostilizados permanentemente por las guerrillas huarochiranas. En estos momentos José Ximénes se encontraba en Matucana, impartiendo órdenes a los jefes de partidas.

FUSILAMENTO DE LOS HEOICOS PATRIOTAS ARGENTINOS  MILLAN Y PRUDAN

Encontrándose Bolívar en el Perú la situación por la que atravesaba el país era bastante incierta. En 1824, los realistas venían obteniendo ventajas en el campo militar, movilizaban activamente sus tropas por el centro y realizaban  incursiones hasta las inmediaciones de Lima, a tal punto que impedían la llegada a la ciudad de artículos de primera necesidad.
Esta delicada situación se agudizó con la sublevación que se produjo en los castillos del Real Felipe en el Callao, entre el 4 y 5 de Febrero, donde tomó el control el general realista Monet, quien salió con 160 prisioneros patriotas, con dirección a la sierra, con el fin de reunirse con sus tropas.
En el trayecto, los oficiales Juan Ramón Estomba y Pedro José Luna, concertaron para fugarse en la primera ocasión propicia, comunicando su proyecto a los oficiales argentinos, Juan Antonio Prudán y Domingo Millán.
El 21 de Marzo, al pasar por uno de los puentes de la quebrada del Rimac, Estomba y Luna se deslizaron a lo largo de una acequia. Millán y Prudán cerraron el claro. Luego los oficiales evadidos se encontraron con el comandante matucanense Esteban Jiménez, quien protegió su fuga y los puso en buen recaudo; este comandante estaba a cargo de una partida que operaba en la zona.
Informado el jefe realista de la evasión colocó en fila a los prisioneros, instándolos a realizar un sorteo para decidir a dos personas que deberían ser ajusticiadas, ante este hecho y para evitar que otro paguen por la fuga, Millán y Prudán se declararon cómplices de la evasión, siendo fusilados en un recodo a la orilla del río Rimac, luego que el sacerdote de Matucana los hubiera confesado. Este fue un hecho reconocido a nivel internacional, pero recién hoy se conoce por medio de documentos de Esteban Jiménez que este oficial peruano protegió la fuga de los patriotas.

En reconocimiento al acto de los oficiales argentinos Millán y Prudán, se levantó un obelisco en el distrito de San Mateo de Huanchor, trabajado por nuestro trascendente escultor Romano Espinoza Cáceda, en donde periódicamente se rinden honores a estos nobles patriotas.

LAS GUERRILLAS DE HUAROCHIRI EN LAS BATALLAS DE JUNIN Y AYACUCHO

El Año de 1824, fue crucial para la independencia del Perú. Se acercaba la campaña final y era necesario que todas las fuerzas estuviesen bien preparadas, por ello, una vez que las partidas estuviesen completamente armadas se dispuso que, obstaculizasen toda comunicación de Lima con Jauja. El mismo Bolívar intervino con esta misión, pues con la finalidad de asegurar la participación efectiva de Ninavilca  y sus guerrillas, le otorgó el grado de coronel y lo designó Comandante de las Guerrillas del Centro.
Establecido el Ejército Unido Libertador en Pasco, con el fin de iniciar la campaña final, el general Antonio José de Sucre dispuso que las partidas huarochiranas siguiesen el movimiento general del ejército patriota, para apoyarlo en la vanguardia o cubrirlo en los flancos.
En tal virtud, Ninavilca, Jiménez y otros jefes de partidas, recibieron tal encargo, el 19 de Junio de 1824, desde la ciudad de Huanuco, para iniciar la marcha cada cual con su respectiva guerrilla, las mismas que el 6 de Agosto de dicho año, dieron su apoyo para el triunfo en la histórica Batalla de Junín.
Luego de la victoria, las guerrillas huarochiranas recibieron órdenes de regresar a su zona de origen, con el fin de hostilizar al enemigo que se hallase en Huarochiri.

Consumadas las victorias de Junín y Ayacucho, los realistas aún conservaban en su poder los Castillos del Callao. Bolívar, con el fin de extremar su vigilancia, ordenó al coronel Ninavilca que con su guerrilla se desplazara al pueblo limeño de Chorrillos, haciéndose cargo del mando militar desde ese punto hasta Chilca. La misión de Ninavilca era impedir la comunicación y envío de víveres a los realistas de los Castillos del callao, desde Chorrillos y sus inmediaciones.
La presencia de las partidas de guerrillas huarochiranas en el sitio del Callao, permitió acentuar y estrechar el cerco, obligando al coronel Rodil a firmar la Capitulación del Callao, el 22 de Enero de 1826, poniendo así término definitivo al dominio español en el Perú.
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*Ruperto Cáceda Vidal.
Presidente del Comité de Defensa del Medioambiente y Desarrollo Sostenible de San Mateo - CODEMADES

Autor de los  libros:

-       LA LUCHA DEL PUEBLO DE SAN MATEO DE HUANCHOR EN DEFENSA DE LA ECOLOGÍA Y EL MEDIO AMBIENTE EN EL PERÚ.
-       LAS GUERRILLAS DE    HUAROCHIRI EN LA GUERRA CON CHILE Y LA HISTORIA LEGENDARIA DEL CORONEL MATEO VERA.
-       LA NACIÓN DE LOS YAUYOS Y SAN MATEO DE GUANCHOR. Incario, Coloniaje, República.
     
BIBLIOGRAFIA

-     LA HISTORIA DEL PROTECTORADO, de German Leguia  y Martines, escrito  a inicios del siglo XX
-     COLECCIÓN DE LA INDEPENDENCIA DEL PERU, publicada con ocasión del Sesquicentenario de nuestra independencia nacional por el gobierno peruano
-     HISTORIA DEL PERU INDEPENDIENTE, del historiador peruano Mariano Paz Saldan, escrita en el siglo XIX
-   HUAROCHIRI OCHO MIL AÑOS DE HISTORIA. Editado por la Municipalidad de Santa Eulalia de Acopaya.
-   HISTORIA GENERAL DEL EJERCITO PERUANO, de la Comisión Permanente de Historia del Ejército del Perú.

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