jueves, 31 de marzo de 2011

En otoño se incrementa incidencia de mordeduras de arañas caseras, alertan


Lima, mar. 31 (ANDINA). Con la llegada del otoño el riesgo de mordeduras de la araña Loxoceles Laeta, comúnmente conocida como araña casera, se incrementa notablemente, debido a la manipulación de ropa y otras prendas de invierno que estuvieron guardadas.


Por ello la Estrategia Sanitaria Nacional de Zoonosis del Ministerio de Salud (Minsa) hace un llamado a la población para extremar precauciones en contra de estos arácnidos.


Indicó además que esta fauna nociva busca refugiarse en lugares sombríos, en los rincones, debajo de los muebles, principalmente de las camas, y en los guardarropas que han estado sin ser movidos durante el verano.


“Las personas afectadas han relatado que encontraron arañas en sus zapatos”, dijo tras enfatizar que “durante el cambio de temporada las mordeduras suelen ser más frecuentes porque la población empieza a usar otro tipo de ropa, especialmente la que estuvo guardada durante la temporada de verano”, refirió.


Asimismo, señaló que en muchas ocasiones las personas han sufrido la mordedura de arañas por colocarse la ropa sin revisarla ni sacudirla previamente con el fin de evitar la presencia de los artrópodos. “No se tiene la costumbre de sacudir o lavar las prendas antes de su uso”, recalcó.


Finalmente recomendó a las familias mantener una estricta limpieza hacia el exterior de las viviendas e incrementarla en el interior, para evitar que se acumule el polvo y se generen las condiciones para que las arañas elaboren sus telarañas.


Según reportes del Minsa, la región Lima se ha convertido en la segunda con mayor número de casos como consecuencia de este tipo de accidentes.


Así, durante el 2010 se registraron 1,540 mordeduras de araña Loxoceles, de las cuales 377 se produjeron en Arequipa, 302 en Lima y 156 en Cusco.


La coordinadora de dicha estrategia, Ana María Navarro Vela, llamó a extremar la precaución entre los niños, porque aunque los adultos son los que reportan la mayor cantidad de mordeduras, los niños son los que están más expuestos a sufrir consecuencias fatales por su poca masa corporal.


Los padres, advirtió el Minsa, deben estar atentos también porque los menores no suelen avisar cuando ocurre el accidente, aunque todo dependerá de la cantidad de veneno inoculado por la araña, precisó la especialista.


Añadió que las mordeduras no siempre se manifiestan en el organismo como lesión cutánea, sino también son de forma visceral a nivel orgánico, problema que puede producir insuficiencia renal y destrucción de glóbulos rojos, e incluso ocasionar la muerte.


La especialista explicó que uno de los primeros síntomas es el dolor intenso tipo ardor o quemazón, con una sensación de lancetazo en el momento de la mordedura, acompañada de escozor en la zona. A medida que pasa el tiempo la lesión se torna rojiza, quema y se comienza a hinchar.


Si el cuadro es severo, además de las lesiones en la piel, se presenta tempranamente malestar general, fiebre, náuseas vómitos y sudoración. Asimismo, la orina se torna oscura y los ojos amarillos, mientras que las complicaciones de la insuficiencia renal agravan la enfermedad.


Indicó que ante la duda de haber sido una víctima de estos accidentes se debe acudir inmediatamente al establecimiento de salud más cercano para ser atendido como una emergencia y por ningún motivo automedicarse.



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