domingo, 7 de noviembre de 2010

¿Peatones imprudentes o en riesgo?


  • Nuestra capital no tiene un adecuado diseño de infraestructura vial para los que se trasladan a pie. Desde noviembre se multará a imprudentes.
  • El 40% de los atropellos fatales se debe a la imprudencia del peatón. (Perú.21)
Desde el próximo 15 de noviembre, los peatones estarán en la mira de la Policía. El que cruce la pista sin respetar el semáforo en rojo, camine al borde de la calzada o intente pasar la vía temerariamente será merecedor de una multa que va desde los 18 hasta los 108 soles.

¿Estas sanciones serán suficientes para bajar la cifra de accidentes causados por los transeúntes? Estadísticas de la Policía de Tránsito revelan que el 40% de los atropellos fatales en las pistas se debe a la imprudencia del peatón, el 80% de ellos porque no respetaron las disposiciones viales.

Según análisis del estudio de ‘Vulnerabilidad de los Peatones en la Vialidad del Área Metropolitana de Lima y Callao’, de la Secretaría Técnica del Consejo de Transporte de Lima y Callao (STCTLC), por cada 100 personas muertas por accidentes de tránsito, 78 son peatones.

¿Pero la imprudencia es la única explicación de tantos temerarios sueltos por las calles? El documento elaborado por la STCTLC explica que existe otro factor que hace que los transeúntes sean irresponsables al momento de cruzar las vías: la inadecuada infraestructura vial para peatones en la ciudad.

Una de las conclusiones de este informe, realizado en junio del año pasado, es que las autoridades municipales no han logrado proveer de mayor seguridad vial a los peatones, siendo estos constantemente víctimas de las deficiencias de la infraestructura y diseño vial.

“No se puede esperar y/o exigir adecuados comportamientos de seguridad vial a los usuarios de la vía, sino se provee facilidades de infraestructura y equipamiento vial sobre cuyos usos se les pueda sancionar”, señalan.

SIN RUTAS. Durante un recorrido por las calles de Lima, Perú.21 observó que en muchas zonas de la ciudad los autos tienen las preferencias y los peatones solo encuentran restricciones u obstáculos para su paso.

Son pocos los lugares que cuentan con semáforos para peatones, y sí los hay los conductores no respetan el tiempo del caminante. Un ejemplo es lo que ocurre en el cruce del jirón Lampa y la avenida Emancipación, en el Cercado de Lima. Allí hay un semáforo para peatones, pero cuando la luz se pone verde y las personas se disponen a cruzar, de pronto tienen que torear a los autos que voltean desde Emancipación.

Otro obstáculo que hay es la ‘invasión’ de las veredas, ya sea por autos mal estacionados u obras de construcción. Esto obliga a seguir otra ruta: el borde de la calzada.

Los puentes peatonales son otro problema. Un considerable número no tiene rampa de acceso para discapacitados, ancianos o madres gestantes. Un ejemplo es el que se encuentra junto al Hospital del Niño, en la avenida Brasil. Las personas tienen que hacer un gran esfuerzo para subir las escaleras.

Todas estas situaciones han hecho que los ciudadanos busquen soluciones individuales a los problemas que se les presenta al desplazarse a pie por la ciudad. Las autoridades tienen la palabra.

Katia Aguirre
Peru21

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