Talibanes reivindican la autoría de dos ataques suicidas, en una academia militar cerca de la ciudad de Peshawar, por muerte de líder de Al Qaeda.
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| La mayoría de víctimas son reclutas. Hay por lo menos 115 heridos. |
Al menos 80 personas murieron hoy en dos ataques suicidas contra un centro de adiestramiento de una unidad paramilitar en el noroeste de Pakistán, informó el viceprimer ministro de la provincia de Jyber Pajtujwa, Bashir Ahman Bilur.
La milicia talibán se atribuyó los ataques explicando que estos se llevaron a cabo en venganza por la muerte del líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden, abatido por un comando estadounidense el 1 de mayo, y por las “atrocidades cometidas por fuerzas paquistaníes en áreas tribales”.
Los atentados suicidas se produjeron a las afueras de la base de la fuerza paramilitar Frontier Constabulary en el distrito de Charsadda, cerca de la ciudad de Peshawar, cuando los reclutas se disponían a abandonar el centro de instrucción para pasar unos días con sus familias.
La Frontier Constabulary es una de las fuerzas paquistaníes que luchan en el primer frente contra los insurgentes talibanes, por lo que frecuentemente es blanco de los ataques rebeldes. La mayoría de los muertos son reclutas. Según fuentes hospitalarias, al menos 115 personas resultaron heridas, de las que 15 se encuentran en estado grave.
Un comandante de la unidad paramilitar dijo que los dos suicidas se dirigieron en motos a la entrada principal del centro cuando los reclutas estaban por partir. Uno hizo estallar los explosivos que llevaba consigo junto a un autobús. El segundo se hizo volar por los aires cuando la gente acudía al lugar para rescatar a las víctimas de la primera explosión.
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