lunes, 14 de julio de 2014

Irritabilidad, pesadillas o mal comportamiento: síntomas de depresión infantil


Foto:ANDINA/Difusión
Lima, jul. 14. La pérdida de afecto, la preocupación de los padres por las cosas materiales, o confundir ciertos cambios de comportamiento con inconductas propias de la edad podrían desencadenar severos cuadros de depresión infantil, advirtieron hoy médicos especialistas.

La psicóloga del Sistema Metropolitano de la Solidaridad (Sisol), Eva Caballero, refirió que existe la idea errónea de que la depresión se manifiesta únicamente con tristeza o llanto y aconsejó a los padres compartir más tiempo al lado de sus hijos para evitar males mayores.

Comentó que en los niños los síntomas son diferentes, ya que la depresión a temprana edad se caracteriza por la irritabilidad, el mal comportamiento, la falta de sueño o las pesadillas recurrentes; inclusive, en los colegios son víctimas de la intolerancia, tanto de profesores como de compañeros.

La especialista del Sisol aseguró que muchas veces se confunden estos síntomas con inconductas, o pensando que son hiperactivos, cuando lo que en realidad les afecta es la depresión. 

Caballero Jiménez consideró que este problema es un asunto de piel, de contacto padres-hijos, muchas veces olvidado porque los padres dedican más tiempo al trabajo y al conseguir dinero que a pasar momentos con sus hijos. “Si no refuerzan estos lazos, inevitablemente los hijos se irán desvinculando”, aseveró.

El ser humano se alimenta de emociones y afecto, opinó Caballero. “Si no los alimentamos con emoción y afecto, ese niño estará carente de vitaminas de amor, proteínas de cariño y carbohidratos de abrazo”, sostuvo la psicóloga del Sisol.

“No es necesario apapachar a los hijos, sobre todo cuando ya son algo mayores, pero una expresión de afecto o ternura reforzará ese vínculo y permitirá que nuestros hijos se desarrollen, crezcan, sean firmes en sus decisiones o sepan dónde ir y cómo alcanzar sus objetivos”, enfatizó.

Aconsejó a los padres estar siempre al tanto de la salud emocional de sus hijos, para identificar ciertos patrones de conducta, ya que la ausencia de estos y la incapacidad de los niños para expresar lo que realmente están sintiendo, pueden perjudicar al menor.

Si los niños presentan irritabilidad, insomnio, pesadillas constantes, o no quieren dormir solos y reciben quejas de sus profesores por mala conducta, busque ayuda, porque si estos síntomas persisten por más de 15 días, estamos ya ante un caso de depresión infantil, concluyó Caballero Jiménez.

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