domingo, 26 de diciembre de 2010

Lentes con protección UV evitan daños a la vista


La luz ultravioleta tiene diversas aplicaciones en medicina, como en la esterilización del instrumental utilizado en esa profesión, ya que puede eliminar toda clase de bacterias y virus sin dejar residuos a diferencia de los productos químicos. Sin embargo, en el medio ambiente y sin la protección adecuada por parte de la persona, constituye un grave riesgo para su salud ocular.

Entre los riesgos que amenazan a las personas está el desarrollo de cataratas, que es la pérdida de transparencia del cristalino (membrana que permite la adaptación visual del ojo a diferentes distancias), así como cáncer de párpados y degeneraciones maculares, advirtió Jorge Velazco Quiroga, director general del Instituto Nacional de Oftalmología (INO).

La exposición de la vista a los rayos ultravioleta también puede originar alteraciones celulares cancerígenas en la córnea y la conjuntiva (membrana fina y transparente que reviste la superficie interna de los párpados y parte del ojo), explicó el especialista.

Cabe indicar que los rayos ultravioleta son invisibles y tienen una mayor intensidad entre las 11 de la mañana y las 2 de la tarde.

Uso de lentes
Velazco Quiroga enfatizó que utilizar lentes para sol con protección contra los rayos ultravioleta (UV) puede evitar graves problemas en su salud, sobre todo si se expone excesivamente al sol en esta temporada de verano que se inicia.

Una mala elección de los lentes puede provocar fotofobia o molestias provocadas por la luz, así como la pérdida de la capacidad de adaptación a los cambios bruscos de iluminación. Por tanto señaló que los lentes deben ser adquiridos en ópticas que ofrezcan garantía y seguridad y por tanto, debe evitar comprarlos en puntos de venta ambulatorios.

Asimismo recomendó que al adquirir estos productos no dejarse llevar por el color oscuro de los lentes, pues esa condición no brinda protección. Explicó que la pupila disminuye y aumenta su tamaño como mecanismo regulador de entrada de la luz y si las gafas son oscuras y sin filtros, reducen la intensidad de luz visible pero no impiden el paso de los rayos del sol invisible y nocivo, lo cual “engaña” a los ojos y lo deja más expuesto.

Acuda al oftalmólogo
Ante la necesidad de utilizar anteojos, el director del INO indicó que lo primero que deben hacer las personas es acudir al oftalmólogo a realizarse una evaluación completa y recibir orientación sobre el diagnóstico y uso adecuado de las gafas, según las necesidades personalizadas de cada paciente.

Asimismo pidió a las personas asegurarse que los lentes de sol no impidan la buena visibilidad, ya que un lente muy oscuro puede interferir con la agudeza visual hasta afectar el desempeño del usuario en actividades cotidianas y de cuidado como por ejemplo conducir vehículos.

Fuente: La República


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